Media Luna es una invitación a ser partícipe en la gestación de un gran vino. Apostar a su potencial y asumir los riesgos de la espera.
En este sentido, nos diferenciamos de la modalidad tradicional de comercialización y ofrecemos un circuito de ventas cerrado.
Nuestros vinos se comercializan en módulos de compra mínima equivalente a 40 cajas de 6 botellas.
Habiendo fijado un precio final para la unidad, abrimos la venta de cada añada poco tiempo después de la cosecha.
A partir de allí, se contempla una escala de bonificaciones que acompaña al proceso de vinificación.